La Coruña una de las más importantes ciudades gallegas supuso una grata sorpresa. Es una ciudad perfecta para una escapada de fin de semana o al menos una visita de un día; viajar a La Coruña es una experiencia que merece la pena tener.
Una visita esencial , los lugares más bonitos de La Coruña serían:
La Torre de Hércules
La Marina y Ciudad Vieja
La Plaza de María Pita y el Centro
Asomarse a las playas de Orzán y Riazor.
También sugiero tomar algo en Taberna da Galera, lo comento al final de la página.
Nosotros empezamos la visita por la Torre de Hércules, Patrimonio de la Humanidad y el faro en activo más antiguo del mundo. Fue construido por los romanos en el siglo II. Actualmente es visitable, más información aqui.
Hay un amplio parking para dejar el coche y una oficina de información y turismo. A su alrededor hay un parque escultórico con numerosas obras, que merece la pena ver con tranquilidad.
Lo primero que vemos es la escultura de Breogán, uno de los fundadores de la ciudad según algunas leyendas.
Hasta los pies de la Torre hay una ligera pendiente, en la que mucha gente posa y saca fotos.
En la parte superior hay bonitas vistas de los alrededores, como punta Herminia, o la Rosa de los Vientos.
Bajo la Torre, también hay unos WC públicos de libre acceso.
Para completar la visita al lugar, se puede hacer un recorrido por algunas de las esculturas colocadas por la zona.
Al coger distancia respecto de la Torre obtenemos diferentes visiones de ésta.
Para mi una de las más bonitas es en el camino a Punta Herminia
El paseo se puede hacer como en una hora.
Desde aqui cogimos el coche y nos dirigimos al centro para dejar el coche en el parking de los Jardines Méndez Núñez. En el camino hay bonitas vistas de la ensenada del Orzán.
Desde los Jardines vamos primero a asomarnos al paseo marítimo y las playas de Orzán y Riazor; se tarda cinco minutos andando.
Dividiendo las dos playas hay un saliente en el que está el monumento a los Héroes del Orzán, dedicado a unos policías nacionales que murieron tratando de salvar a una persona.
Desde este punto vemos a la izquierda la playa de Riazor,
y a la derecha la playa de Orzán.
Volvemos a los Jardines de Méndez Núñez, que separan el Centro de la ciudad del puerto; un lugar muy agradable para descansar a la sombra. Hay un estanque y gran variedad de árboles y plantas.
También se encuentra el obelisco, del siglo XIX, rodeado de edificios modernos.
Están rodeados de edificios singulares como el Casino.
Al finalizar el recorrido de los jardines, llegamos al puerto y vemos las galerías de La Marina, uno de los lugares imprescindibles de La Coruña. Un conjunto de casas con miradores acristalados. Hay que verlas a partir de las 12, cuando el sol les da de frente.
Para mi es de lo más bonito de La Coruña.
Siguendo el paseo Marítimo que da la vuelta completa a la ciudad siendo el más largo de Europa con 13 km de longitud, vamos viendo otras perspectivas de La Marina, mientras nos dirigimos hacia el Castillo de San Antón.
Antes de llegar al castillo vemos el puerto comercial de La Coruña.
El Castillo de San Antón es una fortaleza construida en el siglo XVI para defender la ciudad de los ataques de los piratas, fundamentalmente ingleses, como Francis Drake (la Armada Invencible partió de La Coruña en 1588). Actualmente es un museo de Historia de la Ciudad.
Junto al Castillo está el Puerto Deportivo.
Desde aqui entramos en la Ciudad Vieja, que aun conserva parte de sus murallas.
La Ciudad Vieja es un conjunto de calles estrechas, plazas, iglesias románicas y palacios de diferentes épocas.
Uno de los primeros lugares que se encuentran, justo sobre la muralla son los Jardines de San Carlos, del siglo XIX, en los que destaca la tumba del General inglés John Moore.
Muy cerca, en la Plaza de Carlos I, se encuentra el Museo Histórico Militar de La Coruña en lo que era el Convento de San Francisco. Es de acceso libre y hay expuestos una gran cantidad de armas de diferentes épocas, uniformes, maquetas de barcos etc…es bastante completo. Me sorprendió.
Con motivo del 75 aniversario del Desembarco de Normandía, cuenta con una exposición temporal durante el verano de 2019 relativa al evento.
Desde aqui vamos callejeando y admirando los diferentes rincones de la Ciudad Vieja así como sus tranquilas calles.
Uno de los lugares a visitar es el Convento de Santo Domingo, de fachada barroca.
En la Plaza de Santa María, se encuentra uno de los templos más importantes de la ciudad, la Colegiata de Santa María del Campo, del siglo XII con una bonita portada en la que resalta un gran rosetón.
Frente a ella el Palacio Cornide de estilo barroco y en tiempos sede del Ayuntamiento.
Desde aqui bajamos a la Plaza de Azcárraga, caracterizada por sus grandes árboles y la fuente del Deseo.
Contigua a esta plaza, está la Plaza de la Constitución, en la que se encuentra la sede de la Capitanía General, en un edificio del siglo XVIII.
Y colindante se encuentra también la iglesia de Santiago, iglesia románica del siglo XII.
El interior es sencillo pero bonito.
Desde aqui bajamos hacia lo que es el Centro, abandonando la Ciudad Vieja. Las casas son más modernas, y ya muestran esos miradores típicos de La Coruña. Se puede apreciar en la Plazuela de los Angeles.
En dos pasos llegamos a otro de los lugares emblemáticos de La Coruña: la plaza de María Pita.
Enorme plaza en la que destaca el edifico del Ayuntamiento, al igual que la plaza construido en el siglo XIX.
El otro elemento que llama la atención es el monumento dedicado a la heroína de la ciudad María Pita, quien durante el ataque de los piratas ingleses en 1589 capitaneados por Francis Dake, arrebató el estandarte a un corsario británico levantando el ánimo de las tropas y defensores locales impidiendo la caída de la ciudad.
La Plaza es rectangular y porticada, encontrándose en sus arcos restaurantes y tiendas.
Saliendo de la Plaza enfilamos la calle Real, calle peatonal donde se encuentra gran parte del comercio de la ciudad. El típico sitio para ir de compras.
Paralela a esta calle está la calle Galera, onde se encuentras lasa tabernas y restaurantes. nosotros estuvimos en Taberna da Galera. La calle está repleta de restaurantes pero a diferencia de los demás este está renovado y ofrece un aspecto moderno y bien decorado, bonito.
Las raciones son generosas. Probamos pulpo, que era una tempura con una salsa de sésamo y jenjibre, y nos gustó, fue una manera diferente de tomar pulpo.
La Tortilla de Betanzos, muy buena, muy jugosa.
La croca de ternera con unos filetes de ternera cortados tipo chuleta, con patatas y ensalada.
La tapa de croquetas son seis y también estaban buenas
De postre la tarta de queso está muy bien.
El café también es un punto.
Un descubrimiento, para volver y recomendar; fue el colofón a nuestro viaje por Galicia.