La Granja de San Ildefonso se empezó a construir a primeros del siglo XVIII por orden de Felipe V, primer rey Borbón, y como recuerdo o imitación de Versalles.
Está a muy poca distancia de Segovia, a 15 minutos en coche, se puede ir para pasar una tarde.
Alrededor del palacio se creó una especie de pueblo, cuyas casas, por su estilo recuerdan a Francia. Hay un parking amplio para coches antes de entrar a la población, no se puede acceder en coche dentro.
Caminando a través de unos jardines se accede al complejo, Se puede visitar el Palacio y/o los Jardines.
En mi opinión, lo más característico son los jardines.
El interior del palacio es una sucesión de salas, no demasiado diferentes de otros palacios como el Palacio Real de Madrid o el de Aranjuez. No tiene, para mi gusto el mismo atractivo histórico que el Alcázar de Segovia o El Escorial. Lo más bonito es la planta inferior, con unas esculturas muy bonitas y vistas al jardín.
La entrada al Palacio es gratis si se es familia numerosa, pero hay que llevar la documentación que lo acredite.
Jardines de la Granja de San Ildefonso
Sobre los jardines, diría que son lo mejor del complejo, aunque en las tres veces que he estado en 30 años, parecen no haber cambiado, siempre hay alguna zona en obras, y en ocasiones da sensación de cierta dejadez. Se hicieron inspirándose en los de Versalles, pero distan mucho de parecerse a ellos, hay menos fuentes y no son tan diferentes entre sí. No obstante, son agradables de pasear con buen tiempo.
Como en el caso del Palacio, la entrada a los jardines es gratis si se es familia numerosa, pero hay que llevar la documentación que lo acredite.
La mayoría de las fuentes quedan a la derecha del palacio. Las más conocidas son la de Neptuno, la Fama, Baños de Diana, las Ranas…
La imagen típica es ascendiendo por la escalinata frente al palacio.
En cuanto a las fuentes conviene asegurarse de hacer la visita coincidiendo con el ENCENDIDO de alguna fuente, de otro modo es un poco deprimente pasear por los jardines con todo apagado.
Normalmente empiezan en Semana Santa y suele durar hasta septiembre; son los miércoles, sábados y festivos (no domingos) a partir de las 17:30 horas, y los domingos, a las 13 horas.
Las fuentes que se encienden son Canastillo, Baños de Diana, Ranas y La Fama, Carrera de Caballos, Ocho Calles, Ranas y La Fama. Pero no se encienden juntas van alternando según los días. Hay solo tres días en que ponen todas las fuentes a la vez, el 30 de mayo, el 25 de julio y el 25 de agosto.
Las fuentes las encienden de una en una, en un orden preestablecido con lo que toda la gente se desplaza de una a otra a la vez y siguiendo al encargado de hacerlo. Procedimiento que a mi no me gusta nada, puesto que todo el público se desplaza como en manifestación de una fuente a otra ocupando todo el espacio. En vez de encender todas las fuentes a la vez, y que hubiera una distribución espontánea del público.
En Versalles por ejemplo, encienden todas durante un par de horas y da tiempo a verlas, y sin aglomeraciones excesivas pues la gente se reparte por el recinto a diferencia de aqui, que encienden 4 alternativamente, y todo el público apiñado. Nosotros lo que hicimos fue ver una de lejos, ir a la siguiente antes que el resto, y al menos ver una en primera fila. Ojo que según como sople el viento te puedes mojar.
Eso sí, a pleno rendimiento las fuentes son muy bonitas.
La fuerza de los chorros es progresiva, va cogiendo fuerza.
Merece la pena acercarse al denominado Mar, es para mi de lo mejor, es un lago con una pequeña casita en la orilla y vistas a los montes cercanos. Como está en el extremo opuesto al Palacio, y algo alejado, unos 15 minutos andando, poca gente se acerca y es un remanso de tranquilidad.
En resumen, un lugar idílico, que bien gestionado y con una buena inversión podría ser espectacular, y que en la práctica está infrautilizado.
https://www.patrimonionacional.es/real-sitio/palacio-real-de-la-granja-de-san-ildefonso